"UN CUBANO SUELTO EN BUENOS AIRES" |
Con una barba tupida y una gorra al
mejor estilo Che Guevara, el cubano Frank Delgado llegó hace dos meses
a la Argentina con la intención de presentar "Trova Tur".
El disco, grabado en vivo en la Casa de las Américas de La Habana fue
producido por una empresa argentina que lo invitó a tocar en Buenos
Aires. "Soy independiente e itinerante –se define Delgado-
porque hacer música en Cuba es muy difícil". Como escala de un periplo permanente
que comenzó hace cinco años cuando entró a dar vueltas por el mundo
con su guitarra a cuestas, mañana a las diez de la noche actuará en un
pub de San Telmo (Defensa al 300) y empezará a cumplir una asignatura
pendiente que dice cargar desde hace una década. "Se me hizo un
poco tarde, pero el trámite para viajar no fue nada fácil", admite.
Ahora su pasaporte luce sellos de España, Suecia, Brasil y México
gracias a que varias instituciones lo invitaron a tomar cursos o a
acompañar a Silvio Rodríguez, por caso. A mediados de los ’80, Rodríguez y
Pablo Milanés llenaban estadios y teatros porteños cantándole a la
Revolución. Delgado, quien se reconoce como un "producto de la
trova cubana que no inventó nada" cree que esa temática ya tuvo
su momento de gloria y que ahora la gente prefiere la crítica y la
dureza en las letras antes que la poesía. El uso indiscriminado del turismo como
fuentes de divisas para la isla es una de esas quejas recurrentes a lo
largo de todo el disco. Irónico y punzante a la vez, Delgado –35 años–
la embate contra "la explotación indigna de nuestros recursos.
Yo no canto boleritos ni vamo a bailar mi negra en los hoteles
mientras decenas de suizos o alemanes toman piña colada. Eso no aporta
nada". "Pero chico – agrega
Delgado – aunque el cubano no tenga mas remedio que acudir a
las palmeras, se podrían buscar otras formas de presentarnos al
mundo". Si bien es la primera vez que pisa
suelo porteño, el trovador asegura que conocía la ciudad porque se
contactó con muchos artistas argentinos durante sus giras por Cuba. "Soy
uno de los cubanos que más conoce la música de aquí", se
jacta. Y enumera a sus favoritos: Mercedes Sosa, Suna Rocha, Raúl
Carnota, Fito Paez, Charly García y Juan Carlos Baglietto. De su visita por Argentina espera "comerme
como un pac-man toda la cultura que pueda" y juntar algo
de dinero para poder ir a cantar a Chile y Perú. Septiembre lo
encontrará de vuelta en su país, donde vive con sus padres y cuando
puede – y me dejan – canta para el público de su país. "Acá
juego en la tercera pero en Cuba voy en primera", dice
orgulloso. Viernes
12 de junio de 1996 |