El medio ambiente o el medio humano, concebido como biosfera (Esfera de vida), es un sistema que engloba a todos los seres vivientes de nuestro planeta, así como el aire, el agua y el suelo que constituye su hábitat donde se desarrolla su ciclo de vida. La acción del hombre sobre el equilibrio ecológico data de su aparición sobre la tierra y ha supuesto una regresión de los sistemas naturales, en relación con el estado que se podría suponer más probable si la especie humana no hubiera existido presente en la biosfera terrestre.
CONTAMINACIÓN
MUNDIAL
Podemos observar las siguientes acciones del hombre sobre el ecosistema: del hombre primitivo cazador y pescador al hombre pastor y agricultor, el fuego desempeño una labor fundamental en el paso ha esta etapa, siendo el medio más poderoso para la transformación de medios ambientes. El talar y quemar fue técnica básica para el cultivo.
El paso siguiente fue el desarrollo de la producción económica, donde el hombre puede disponer de medios técnicos más eficaces, esto coincide con el aumento de la densidad de las poblaciones, teniendo el broche de oro con la revolución industrial, donde se generan nuevas fuentes de energía, los que trajeron consecuencias directas sobre la biosfera.
Una de las preocupaciones fundamentales de los ecologistas de todo el mundo, es motivar e incentivar la preservación de la naturaleza, especialmente de flora y fauna nativa. Las investigaciones más recientes, han determinado que esos recursos desempeñan una labor fundamental en la continuación de los procesos ecológicos esenciales para la existencia de vida en el planeta.
Para que esto pueda ser realidad, se requiere identificar y aprovechar adecuadamente aquellos terrenos que puedan cumplir, en mejor forma y con menor riesgo de degradación, funciones eminentemente productivas de bienes y servicios útiles para el hombre.
También es de primera importancia proteger las especies animales y vegetales evitando su extinción y de preservar en forma clara muestra de ecosistemas singulares o representativos de los existentes en el país, incluyendo en ello la mantención de un paisaje natural.
La experiencia recogida a nivel mundial ha indicado que uno de los métodos más efectivos para proteger la naturaleza es a través de un conjunto de espacios naturales dedicados a ese fin. Para cumplir con estos objetivos de conservación de los recursos naturales renovables y de la naturaleza en general, se creo en Chile un Sistema Nacional de Áreas Silvestres Protegidas por el Estado (SNASPE), que está bajo la tutela, administración y control directo de la Corporación Nacional Forestal (CONAF).
Este sistema esta integrado actualmente por cuatro categorías de manejo: Parques Nacionales, Reservas Nacionales, Monumentos Naturales y Reservas de Regiones Vírgenes. Cada una de ellas comprende un conjunto de unidades cuyos terrenos son propiedad del estado y están sometidas a un régimen jurídico especial.
Chile es uno de los pocos países del mundo que reúne, a lo largo y ancho de su geografía, las más diversas condiciones de climas y relieves. Es por lo mismo, un lugar donde se aprecian desde los paisajes desérticos hasta los frondosos bosques y helados canales australes.