Arequipa es conocida como la "Ciudad Blanca", esto es por la blancura del "sillar", piedra volcánica  con la que han sido construidos sus  templos, como el de La Compañía; conventos, como el de Santa Catalina; y palacios, como el de Huasacache.Arequipa está situada a 1,000 km. al sur de la ciudad de  Lima y a una altitud de  2,363 m.s.n.m.Cuenta con una cantidad de  población que sobrepasa el millón de habitantes.

Cuenta con uno de los mejores climas del Perú, destacando su límpido cielo azul. Su temperatura promedio es de 21° C. Denominada "La Ciudad de la Eterna Primavera" por Miguel de Cervantes.
Limita por el sur con Moquegua, por el este con Cusco, por el sureste con Puno, por el noreste con Apurimac y por el Norte con Ayacucho.

Su nombre deriva de la frase quechua "Arequipai" que significa "Sí, quédense", y más que una simple coincidencia, lo del nombre es una realidad que se mantiene en el tiempo, porque en las calles, en la actitud de la gente, se percibe una extraña fuerza, un  impulso que invita a quedarte en la ciudad.

La Historia del Departamento de Arequipa data de épocas remotas. Sus primeros habitantes son de 6 mil a 8 mil años antes de Cristo, durante el periodo Paleolítico. Evidencia de su existencia se encuentra cerca a la región de Yarabamba en Pampa Colorada y en Sumbay, detrás del Misti, donde se aprecian pinturas rupestres en cavernas del lugar..

Cuando los incas expanden sus dominios a estas regiones en el siglo XV encontraron dos grupos étnicos en la región del valle del Colca,  los Callaguas y los Cabanas, quienes se dedicaban y destacan por su agricultura, lo cual se evidencia hasta ahora con su andenes y sistema de riego.

El 15 de agosto de 1540, el capitán García Manuel Carbajal funda la Villa Hermosa de Arequipa y un año mas tarde el rey Carlos V la eleva a la categoría de ciudad, otorgándole el escudo de armas el cual se mantiene hasta nuestra época.

La ciudad conmemora el aniversario de su fundación con una feria que dura toda un semana. Los fuegos artificiales que se realizan en la Plaza de Armas son espectaculares.

La ciudad esta llena de iglesias y casas que datan a la época de la colonia. Santa Catalina, un convento conatruido en 1579, fue restaurado y abierto al público en 1970, el mismo está rodeado de grandes muros  y es como una ciudad dentro de otra ciudad. Las monjas que vivieron allí llevaron una vida aislada del mundo exterior. Ahora ellas viven en un área mas pequeña y el resto del convento esta abierta a la vista del público.