Vuelve
el superespía más incompetente y grosero que nunca haya estado
al servicio de Su Graciosa Majestad. Y es que Austin Powers es un típico
producto de la cultura pop inglesa de los 60, un agente secreto de dentadura
horrible e irrefrenable tendencia a revolcarse con toda fémina que
se le ponga a tiro.
En la primera película es criogenizado
y revivido en los 90 para perseguir a su archienemigo, el también
ultracongelado Doctor Maligno. Ahora, el despiadado e inepto megavillano
regresa con su máquina del tiempo a 1969, y Austin tendrá
que seguirle los pasos para desbaratar sus infantiloides planes de dominación
mundial.
Pero nuestro héroe tiene un grave problema:
Maligno le a robado su "mojo" (algo así como su fuerza vital), sin
el que se encuentra totalmente indefenso. Para recuperar la llave de su
éxito y detener de una vez por todas al malvado criminal, Powers
contará con la inestimable ayuda de una espía en estado de
celo perpetuo que responde al improbable nombre de MariFé Lación.
Cabe decir que, al igual que en la anterior entrega,
Mike Myers interpreta varios papeles en este caso a: Austin Powers, Doctor
Maligno y un tal Gordo Cabrón (compinche de Maligno).
El doblaje (para mi) es lo mejor de la película,
con Florentino Fernández (El Informal) doblando a los tres personajes
de interpreta Myers y que hace aún más divertida una película
ya de por sí graciosa.
Resumiendo: A.P. es una película divertida pero con un guión un tanto pobre, utilizando gags que ya habíamos visto en la primera parte. Se la recomiendo a todos aquellos a los que les gustó la primera y, sobretodo, al os seguidores incondicionales del programa El Informal.
Euler-