La única cadena de tiendas, especializada en comics, en el país. La primera en ofrecer ventas por catalogo a provincia. El lugar donde todos los Universos de los comics convergen, no solo los de DC y Marvel. Mas de 150,000 comics en existencia.
Poco después ya no era solo un puesto sino que ya habían adquirido el de a lado, pero el evento que realmente puso, al entonces llamado Comicoapa, en el mapa fue la venta de LA MUERTE DE SUPERMAN, este evento, que llego hasta los medios masivos de comunicación, origino el nuevo BOOM del comic. Un par de meses después con gran pompa y circunstancia abrió sus puertas la primera tienda llamada COMICASTLE, en la misma Plaza Trico donde está ahora, pero en un local que esta subiendo las escaleras (ahora Jenny Craig).
¡Que días aquellos!, en los que la cantidad de personas era tal que tenían que hacer cola en la escalera. Era una verdadera aventura, y era muy emocionante, ya que no había lugar como ese en México, una tienda de comics al estilo de las gringas. Al poco tiempo ya ni ese local alcanzaba el espacio y se cambio a los locales que actualmente ocupa. El local de pericoapa nunca desapareció, solo se cambio a Plaza Girasoles. Meses después, abrió otra sucursal de COMICASTLE el centro comercial Pericentro. Tres tiendas cubriendo las zonas más concurridas de nuestra ciudad.
Pero la historia no termina ahí, muy pronto nuestros amigos de Guadalajara podrán disfrutar del servicio y surtido excepcional que siempre ha distinguido a COMICASTLE en su ciudad. COMICASTLE Guadalajara abrirá sus puertas en breve. Estén pendientes.
TODO ESTO Y MUCHO MAS ES COMICASTLE
¿Como empezó todo esto’, aunque no lo crean, hace mucho tiempo, en un bazar, muy, muy lejano, llamado Pericoapa. Un hombre con mucha determinación y mucho trabajo, llamado David Noriega, decidió cambiar un poco la naturaleza de su negocio, el vendía software para computadoras personales, pero decidió comprar en EUA una caja chica de comics, a ver que tal se vendían, las cuales desaparecían en menos de lo que canta un gallo, muy al asombro de David. La voz se corrió entre los aficionados, que hasta entonces, estaban condenados a visitar todos los Sanborn’s de ésta ciudad, buscando el comic que no pareciera falda de Hawaiana, y cuya etiqueta de precio no destrozara la portada al despegarla. Esa voz se corrió rápidamente, ya que esas dos cajas de comics pronto se convirtieron en 5, 10, 15, un baúl lleno, estampas, juegos de rol, etc., etc.
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