De Corral voy a Valdivia
mientras se duerme la tarde;
por un camino de luna
voy remontando las aguas.
Por un camino de plata
va mi barca sobre el río:
es la luna que se baña
en la noche y en el frío.
En el río Calle Calle
se está bañando la luna;
se está bañando desnuda
y está vestida de espuma.
Voy cantando por el río
mientras la luna se baña;
la noche canta conmigo
y yo canto con el alma.
Vengo de Niebla y Amargos,
y he quedado sorprendido,
porque no he visto nublados
ni de amargura he sabido.
En el agua se dibujan
mil reflejos caprichosos:
es la luz de las estrellas
que se duermen poco a poco.