Para cada cosa existe un tiempo y un tiempo para cada cosa. Tiempo de nacer y tiempo para morir, tiempo para plantar y tiempo para cosechar lo plantado. . . Proverbio bíblico
Todos malgastamos nuestros días buscando el secreto de la vida. Pues bien: el secreto de la vida está en el arte. . . Oscar Wilde
La educación tiene el doble poder de cultivar y ahogar la creatividad.
El tiempo es un simple ideal, y el espacio no es más real que el tiempo. . . Anatole France
Nosotros no somos engañados nunca, sino que nos engañamos a nosotros mismos. . . Goethe
Cuando llega la noche y miro el imponente firmamento y sus estrellas, me río de la grandeza y de la miseria de los hombres. . . Henri Bergonzi
Es inútil pedirle a los dioses lo que podemos obtener por nosotros mismos. . . Epicuro
Todo en la vida acontece en una secuencia perfecta entre tiempo y espacio. . . Anónimo
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El crecimiento es un movimiento discontinuo: dos pasos adelante, uno hacia atrás. Recordemos eso y seamos más benévolos con nosotros mismos. La creatividad es un proceso curativo. Podemos ser capaces de pintar un bello cuadro el martes, pero el miércoles no poder dar una pincelada. Es normal. El crecimiento ocurre a saltos y a veces podremos creernos dormidos. No perdamos el coraje, tomémoslo como otra forma del descanso.
A menudo, a una semana de creatividad podrá seguirle otra de pereza. Lo que escribamos por la mañana podrá resultarnos sin sentido a la noche. Pero no lo es. Estamos aprendiendo a hacer, escribiendo aún cuando nos parezca una tarea inútil. Esto es muy importante. Los competidores de maratones sugieren disminuir la velocidad cada vez que se hace un recorrido muy rápido. Lo mismo podemos aplicar a la creatividad.
La tarea creativa no tiene por qué requerir esfuerzo. Practiquemos ser amables con nosotros mismos y empecemos por las cosas cotidianas, concretas.
La expresión "Dios ayuda a aquellos que se ayudan a sí mismos" puede adquirir un nuevo significado. Si en el pasado quería decir que Dios solamente ayudaba a aquellos que se lo ganaban, ahora se convierte en el sorprendente número de pequeños presentes que el creador arrojará sobre aquellos que se ayuden a sí mismos, aunque sea un poquito. Si hoy hacemos una cosa buena por nosotros, mañana Dios hará dos. Estemos alertas para recibir regalos por vías no tradicionales y sorpresivas. Empecemos nuestra práctica diciendo que sí.
Lo principal es experimentar todo esto en soledad. Cada tanto necesitaremos hacer una pausa y ver cómo nos sentimos. Tomarnos varios ratitos al día para, simplemente, escuchar nuestras preguntas. Y responderlas amablemente. Si estamos involucrados en una tarea muy difícil, prometámonos a nosotros mismos un pequeño descanso.
Lo que estoy pidiendo es que nos mimemos. Como seres creativos somos más productivos cuando nos conectamos con nosotros mismos. Empecemos.