"El nacimiento de Paulina Benedetty"
Escrita por Karina Prestinoni, producida por Sara León Copyright © 1997 by TRANS FICTION /TRANS NORD All trademarks or product names mentioned here in are the property of their respective owners. |
Episodio 1
Capitulo I
EL INICIO
Se decidió para el día 5 de Octubre, en ese día Hector saldría de viaje de negocios por algunas ciudades del Noroeste del país y se perdería irremediablemente.
En un día soleado del 5 de Octubre partí rumbo a Mazatlán en el estado de Sinaloa México, manejaba a una velocidad moderada mirando algunas veces la imponente sierra de Durango; la carretera era angosta y con curvas altamente cerradas y peligrosas, el asfalto estaba en muy mal estado y yo trataba de sortear los hoyos y derrumbes del camino. Tres horas y media después me encontraba en el puerto de Mazatlán.
Inmediatamente me dirigí al banco a sacar dinero ya que no contaba con efectivo y tenía que comprar un boleto a la ciudad de México. Me paré en el banco, saque el dinero y manejé por la costera buscando alguna agencia de viajes; encontré una al poco tiempo, estacioné el carro y me dirigí a la agencia de viajes.
Era una agencia de viajes espaciosa con grandes anaqueles con florecería y tres o cuatro escritorios y un privado, esperé algunos minutos y salió a atenderme una joven morena alta y de facciones regularmente estéticas.
- Que se le ofrece?
- Quiero un boleto Mazatlán-México para mañana, tengo entendido que sale un vuelo a las 9:10 A.M. por Mexicana.
- Si, sale una a las 9:10 A.M y otro 13:30 horas.
- Quiero el de las 9:10.
- A que nombre ?
- Paulina Benedetty.
- A ver déjeme confirmar.
La señorita tomo la computadora y confirmó el vuelo; al poco tiempo regresó.
- Todo listo, queda confirmado el vuelo a la ciudad de México a nombre de Paulina Benedetty por Mexicana.
- Muchas Gracias.
Liquidé el boleto y le pregunté
- Conoce algún motel de buena calidad para pasar la noche ?
- Claro ! El Motel San Diego se encuentra más adelante siguiendo por la costera, no es de mucho lujo pero las habitaciones son confortables y se puede descansar bien.
- Muchas Gracias Señorita.
Tomé el boleto y me dirigí al Motel San Diego.
Muy pocas personas entenderían la angustia e incertidumbre por las cuales estaba pasando Hector, estaba a punto de comenzar un nuevo camino en su vida, rompería con todo lo que él era y había sido hasta entonces, seguramente no volvería a ver a sus hermanos ni a sus padres ni a sus amigos ni a ninguno que hubiese tenido contacto con él en el pasado, (exceptuando a su esposa y sus hijos), pero estaba feliz pues ese cambio era lo que más había deseado en toda su vida.
Llegué al motel San Diego, era de mediana calidad estilo colonial sin televisión ni teléfono por lo cual no me agradó y fuí a buscar otros moteles, recorrí la costera como 45 minutos y no encontré ningún motel que valiera la pena (ya que debía tener salida directa a la calle). Eran como las 17:00 Hrs. y quería comunicarme con Laura para decirle que había llegado bien. Regresé al motel San Diego y alquilé un cuarto.
- Señorita donde puedo hablar por teléfono ?
- Por las casetas que se encuentran ahí enfrente puede hacer la llamada por cobrar.
Tomé el teléfono público y marqué el 02, esperé como tres minutos y nadie contestó decidí ir a comer algo y comunicarme después.
Fuí a comer a un restaurante tipo americano que se encontraba un una esquina, era grande con vitrales transparentes comí un caldo tlalpeño y un steack con papas. Cuando terminé de comer me dirigí al teléfono y marqué el 02, espere y nadie contestaba, volví a marcar y esperé por fin la operadora me contestó
- Operadora ?
- Quiero una conferencia a Durango por Cobrar.
- A que número ?
- 1-32-67
Tardo algunos segundos y se oyó la voz de Graciela, la servidumbre
- Bueno ?
- Graciela habla el señor Hector esta la señora ?
- No, no está salió con los niños
- Dile a la señora que llegué bien a Mazatlán que la llamo más tarde.
- Esta bien
Regresé al motel, el cuarto contaba con dos camas, un pequeño buró, un espejo y el baño contaba con su regadera sin cortina y un WC. Bajé mis maletas, cerré la puerta del cuarto y comenzó mi transformación.
Capitulo II
MI TRANSFORMACIÓN
Primero me depilé las piernas, los muslos, los gluteos y el abdomen después me metí a bañar y me rasuré los genitales previendo la operación. Todo el cuarto se llenó de vello corporal al grado que las coladeras ya no desaguaban, el baño se inundó encharcando el cuarto. Salí del baño me sequé y tuve que secar con la toalla toda el agua encharcada en el cuarto. Después de unas cinco pasadas logré secarlo.
Lo siguiente era depilarme la cara, tenía muchos granos provocados por pelos enterrados y estaba preocupado de no poder maquillarme bien, me saqué pelo por pelo con las pinzas pero mi aspecto todavía no me satisfacía, me pasé el depilado eléctrico por el rostro y sacó los vellos enterrados dejando mi piel más tersa, me unté mi crema y me depilé las cejas; siempre había querido cejas triangulares al estilo María Félix y así quedaron. Me acosté y mentalmente programé a mi mente para que me despertara a las 7:00 A.M., previamente había dado instrucciones en la administración para que me levantaran a esa hora. Me dormí esperando nervioso el siguiente día
Como el Big Ben mi reloj interior fue exacto y me despertó a las 7:00 A.M. en punto. Inmediatamente me metí a bañar, después del baño me detallé la cara sacando el vello que hubiere podido salir en la noche y procedí a maquillarme; me puse corrector en la parte de bigote y de la barba, dispersé en mi cara una base de maquillaje y después a base de golpecitos tapé todas las imperfecciones con el maquillaje en polvo. Pase el corrector por las ojeras tapándolas, apliqué delineador liquido en los párpados superiores a nivel de la raíz de las pestañas, me enchiné las pestañas y les apliqué rímel, apliqué sombras color rosa en los párpados superiores, me puse rubor en las mejillas y delineé los labios aplicándoles después un bilé de color rojo. Por último me puse mi peluca castaña y con rizos; miré mi imagen en el espejo y no había duda !era una muñeca¡.
Me sentí decepcionada por los servicios del motel ya que no me habían despertado. Procedí a vestirme, seleccioné la minifalda de mezclilla azul y la blusa de algodón con hombreras y bordados en el cuello, me puse las medias de color rosa claro y las zapatillas blancas; como accesorios utilicé los aretes rosas y la pulsera de latón con grecas. Por último apliqué un poco de perfume atrás de las orejas, en los codos, atrás de las rodillas y en los tobillos.
Por fin estaba lista, el único problema era:
!salir de un cuarto alquilado por un hombre como una mujer!
Miré varias veces por la ventana, había un hombre platicando con la recepcionista. A las 8:00 A.M. se acercaron a la puerta y tocaron.
- Las 7:00 de la mañana
- Gracias respondí.
!Cierto! El Horario de Mazatlán se atrasa una Hora. Tenía que estar en el aeropuerto a las 8:30 A.M. y apenas eran las 7:00 A.M.. Fumé varios cigarrillos, disfrutaba mirándome en el espejo mmm, en ocasiones veía por la ventana esperando el momento propicio..
La recepcionista el día anterior me había pedido un depósito por la llave del cuarto y dentro de mi, mi mente se debatía entre dos alternativas; entregar o no entregar la llave, aún no estaba segura que no me fueran a reconocer cono travestí o que me reclamaran el hecho de que el cuarto hubiese sido alquilado por un hombre.
El momento llegó y con las maletas previamente preparadas, salí del cuarto evitando olvidar algo, metí las maletas al auto y me dirigí a entregar la llave muerta de susto.
- Buenos días, aquí tiene la llave
Dije con voz femenina
- Buenos días
Me respondió la recepcionista
La señorita me entregó solo parte del depósito y a mi me dio pena pedir el resto ya que no había ensayado la voz con demasía, me dirigí al auto alcanzándome la señorita después.
- Se me olvidó darle éste dinero.
- Gracias señorita. (Uf)
Me subí al auto y lo arranqué, no podía sacar bien el clutch ya que se atoraba con la tapa de instrumentos y cables, intenté varias veces y un señor estaba observándome por lo cual me puse medio nerviosa, total pude meter reversa y salí del motel dirigiéndome al aeropuerto.
Ya en el aeropuerto metí el auto al estacionamiento:
Pagué, estacioné el auto y me dirigí al hombre de la caseta y le dije.
- Voy a dejar el auto varios días
- Tendrá que pagar la tarifa por día
- Está bien
- Entonces estaciónelo aquí cerca de la caseta.
Estacioné el auto cerca de la caseta y saqué las maletas. Inmediatamente se acercó a mi un maletero y me ayudó y me dirigí al cubículo donde se registran los boletos en Mexicana de Aviación.
- Buenos días, quiero confirmar este boleto a México
El encargado se quedó mirando el boleto unos instantes
- Lo siento señorita, Quién le vendió este boleto ?
- Lo compre en una agencia de viajes
- Es que este vuelo esta cancelado
Me sentí frustrada y luego pregunté
- Y, cual es el siguiente vuelo a la cuidad de México ?
- A las 13:30 horas
- Bueno confírmelo para esa hora, contesté en tono malhumorado.
Previamente Laura había concertado una cita con el cirujano plástico reconstructivo para el lunes a las 16:00. y si el vuelo salía a las 13:30 horas, duraba una hora y quince minutos y además se perdía una hora por el cambio de horario, jamás llegaría a tiempo a la cita ya que estaría bajando del avión a las 15:45 horas. Además eran las 8:15 de la mañana y tendría que aguardar cinco horas la salida del avión.
Me resigné y me dirigí a la cafetería del aeropuerto. Me causaba asombro la forma en que tantos hombres me observaban ya que me miraban como si yo fuera una mujer muy atractiva. Todavía no estaba muy segura de mi imagen pero fuera del percance del boleto del avión, todo marchaba bien.
Entré en la cafetería y me dirigí a una mesa que se ubicaba al lado de un gran ventanal. Me senté e inmediatamente se me acercó un mesero moreno y de mediana estatura ..
- Que le sirvo señorita ?
Me sorprendía que me llamaran señorita, eso quería decir que no me veo tan vieja.
- Me trae un plato de frutas surtidas y un café por favor.
El mesero regresó a los pocos minutos con el plato de frutas y el café.
Tenía mucho tiempo de espera así que me comí el plato de frutas muy despacio, mientras miraba algunas avionetas que se encontraban aparcadas en los hangares y algunos aviones que aterrizaban y despegaban.
Trataba de no mirar a nadie en especial para que no hicieran hincapié en mi imagen. Pensaba en la operación, en que el cirujano me recibiera ese día, en Laura y mis hermosos hijos Enrique y Fernanda. Estaba ensimismada en mis pensamientos cuando el mesero se acercó y me entregó un papel ..
- Le mandan esto
- Gracias, respondí
Observé el papel el cual contenía mi nombre escrito y se me otorgaban alimentos y bebidas gratis y con cargo a Mexicana de Aviación. Me sentí muy halagada por el cumplido ya que el error los había cometido la chica de la agencia de viajes que me vendió el boleto y no la línea aérea.
Por fin dieron la 13:00 horas, me dirigí al sanitario de mujeres, nunca había entrado a uno por lo cual me sienta expectante, después me dirigí a la sala de abordar allí se encontraban otros pasajeros esperando abordar, gente sin ningún rasgo en particular excepto un pasajero con rasgos orientales, conflexión media y de mediana estatura que desde el momento que entré a la sala no dejo de verme ni un instante, me puso un tanto nerviosa.
Subimos al avión y nos dirigimos a la ciudad de México; algo peculiar fue que no pusieron a ningún pasajero junto a mí en el asiento contiguo a mi izquierda ni en el siguiente que daba al pasillo, pero supuse que era porque el avión viajaba a mediana capacidad.
Ya en la ciudad de México tomé un taxi y le pregunte ..
- Cual es el hotel cuatro estrellas más cercano al hospital San Antonio
- El hotel Kalinda
´ Me respondió el chofer.
- Lléveme ahí
Llegué al hotel Kalinda, es un hotel estilo europeo, muy sobrio y elegante en su decoración con unas banderas colgando en la fachada, se encuentra en un lugar de la ciudad de México llamado Zona Rosa. En el interior cuenta con un restaurante del lado izquierdo, más adelante se encuentra la recepción adornada con un recibidor estilo inglés, con todo el mobiliario en caoba, pinturas y candiles dando un gran estilo majestuoso, más adelante se encuentra la tienda de souvenirs, la agencia de viajes y en el fondo otro restaurante tipo bufete.
Un botones se acercó al taxi para ayudarme con las maletas y ya en la recepción pedí un cuarto sencillo. El botones me indico cual era mi habitación; era un cuarto muy amplio con una cama king-size, una mesita de escritura, varias sillas estilo inglés, un gran espejo del lado derecho y una cómoda debajo del espejo, la alfombra era afelpada y de color vino, contaba además con varios faroles, su closet, su baño con tina, televisión con cable, servibar y teléfono.
Decidí presentarme al cirujano ese día aunque hubiese perdido mi cita. Casi no contaba con tiempo por lo que me cambié de ropa rápidamente; me puse el traje sastre de saco gris cruzado, la falda de cuadros grises de lana, la blusa blanca de algodón sin mangas y con bordados en el cuello, las medias naturales y los zapatos negros. Como accesorios utilice el collar de perlas de imitación, los aretes blancos con forma de racimo de uvas y la pulsera también de perlas. Me retoqué el maquillaje tratando de ocultar muy bien el bigote y la barba y me puse perfume.
Justo cuando terminaba de arreglarme tocaron al cuarto
- Si ?
- Vengo de mantenimiento
Abrí
- Nos dijeron que aquí había una fuga de agua
- Pase a inspeccionar el baño
Respondí
La persona de mantenimientos pasó e inspeccionó el baño
- No, no hay fuga de agua
No? respondí
- Y porque tan sola ?
Me preguntó el de mantenimiento
- Porque acabo de llegar y por favor déjeme sola que me estoy arreglando.
El empleado se fue salí de mi habitación, baje las escaleras y ya estando en la recepción le entregué la llave a la recepcionista y reporté al empleado de mantenimiento de ser un atrevido y grosero con las huéspedes. Nunca hubiera pensado que sería de un carácter tan recatado pero me sentía feliz porque me gustaban los rasgos de mi nueva personalidad.
Espero te haya gustado esta historia si tienes alguna para compartir, por favor mandame un mail.