Los cuentos que he escrito y que gentilmente ha publicado en su página Ana Raquel, son en su mayoría ficción. Solo parte de estos relatos son experiencias reales y concretas en las que he participado, son como las pequeñas chispas de un fogón en una noche oscura, que alumbran y regocijan a los que están alrededor. Que partes son chispas y que partes ficción pura, Amanda nunca lo contará.
Para dar agilidad a los relatos, Amanda no describe los cuidados
que ella, sus amigas o amigos toman para cuidarse del terrible
flagelo de fin de siglo: el SIDA.
No quiero ser cargosa, cada cual sabe lo que hace, pero un solo
segundo de descuido te puede costar la vida. No hay vuelta
atrás, no podés rebobinar y hacerlo de otra forma, si lo
tenés, estás muerto!.
No pienses que no te va a tocar, conocí a algunos que así
pensaban y ahora solo los puedo visitar en el cementerio.
El sida no mata solo al que lo tiene, si no a todos los que lo
rodean (familia, amigos), de una u otra forma (económica, moral
y familiarmente).
Por eso esta advertencia, Cuidate como lo hace Amanda ! y como
dicen en un programa de Televisión: No seas forro usá forro.
Además no quiero que se enfermen mis admiradoras, ya que las
quiero conocer y compartir con ellas una tarde de te, masitas y
algo más en mi sótano ... Las espero a todas.
Amanda Wells.
Amanda me ha pedido que coloque este mensaje como encabezado de
uno de sus relatos, creo y estoy completamente convencida de que
la suya es la actitud correcta, todas tenemos derecho a
divertirnos de la manera que mas nos guste, pero es mejor
cuidarnos mientras lo hacemos.