Giselle me ha enviado otra de sus experiencias, en
esta oportunidad como verás, se ha divertido bastante:
"Una tarde de febrero, mi ama Helena me ofrecio a Deborah, para encargarme de los queacheres de su casa. Era un domingo muy caluroso, pese a ello, Helena me obligo a vestir el uniforme de doncella completo.
Blusa y minifalda de seda rosada, delantal blanco, portaligas y
medias negras, zapatos de taco. Llevaba tambien mis guantes, mi
peluca estilo frances (melenita a la nuca) y el maquillaje
correspondiente.
Antes de llamar a la puerta de Deborah, Helena me hizo arrodillar
y puso una correa en mi cuello. Deborah nos recibio, Helena me
ordeno ser obediente y complacer a Deborah en todo lo que fuera.
Ella estaba vestida simplemente con un camison de saten blanco y
unas coquetas sandalias, yo me encontraba fascinada de estar ahi,
ante ella, queriendo saber que planeaba hacer conmigo.
No voy a aburrirte con los detalles de los quehaceres, en
realidad fue liviano, pues ella parece ser muy ordenada. Luego,
le servi el te. Cuando sirvo a Helena, normalmente debo
permanecer parada cerca de ella, para atenderla, pero Deborah me
obligo a arrodillarme a su lado, y me quito la cadena, dejandome
solo el collar, mientras me decia que seguramente no lo
necesitaria.
Seguro que no, ella es encantadora y yo no me hubiera negado a
ninguno de sus caprichos. En esta posicion la acompañe con el
te, y luego me pregunto si me agradaria un poco de mermelada.
Asenti, y ella, muy sensualmente, abrio sus piernas y dejo asomar
su robusto miembro por encima de su bombachita.
Mi corazon latia nervioso... si la miraba a los ojos, me
encontraba con su expresion tan sensual,... sus pechos asomaban
en el escote de su camison, y su pija por debajo... En seguida se
unto un poco de mermelada en la puntita, y me ordeno lamerlo. Por
supuesto obedeci, y lo lami todo, moviendo mi lengua rapidamente
en la puntita de su pene.
Pedi mas, y ella accedio, untandose con un poco mas, mientras me
llamaba golosa. Como habiamos terminado pronto con las tareas,
nos dispusimos a descansar un momento en el fondo de su casa, al
sol.
Para ello, me hizo usar una de sus bikinis de playa, de color
azul satinado, de esas que llaman "fio dental"
(adivinen por que). Cuando estuve desnuda solo con el bikini,
noto que las uñas de mis pies no estaban pintadas, y ella misma
me enseño a hacerlo. Cuando fuimos al fondo, ella se quito su
salida de baño, y quedo frente a mi, con su cuerpo hermoso,
femenino, sensual totalmente bronceado, usando solamente una
bikini amarilla, en topless.
Note que sus tetas, perfectas, estaban totalmente bronceadas y
que el tomar sol desnuda seria una de sus costumbres... Yo empece
a jugar con mi clitoris, cosa que ella me prohibio en cuanto se
dio cuenta.
Despues de un rato, me dispuse a ayudarla con su baño. Una vez
alli, se arrodillo frente a mi, y me sorprendio con un profundo
beso, mientras aplastaba sus senos contra mi. En seguida se dio
vuelta, se puso en cuatro patas y me ofrecio su colita.
Le desate su bikini, loca de deseo por poseerla.... Por un
momento pense que asi seria, pero me ordeno besarla. Resignada y
excitada, bese su ano y cola, introduciendo mi lengüita,
mientras su pija se iba poniendo mas y mas dura... Cuando estuvo
satisfecha se sento en el borde de la tina y me ordeno darle una
buena mamada.
Totalmente entregada, me dedique a chupar y lamer su delicioso
miembro. Yo adoraba esa mamadera en mi boca, esperando su leche
calentita... Luego fue mi turno. Me arrodille en la tina,
ofreciendo mi colita a ella; con un solo empujon estuvo dentro
mio. Me agarro por las caderas, y con suaves sacudidas, apoyando
sus tetas contra mi espalda, me llevo al delirio.... hasta que
por fin, me lleno con su crema... Luego se ocupo de mi.
Me hizo arrodillar, y ato mis manos a la espalda. Cuando estuve
inmovilizada, tomo mi clitoris entre sus manos, y me amaso,
moviendo sus manos en circulos, frotandome con las palmas...
Recogio mi semen en sus manos, y luego me lo hizo lamer, como
dandome mi comida.
Poco rato despues, Helena volvio a buscarme. Deborah le dijo que
me habia comportado como una completa señorita, y la congratulo
por mi entrenamiento. Su ultima orden para mi fue, que contara a
Helena con lujo de detalles lo sucedido esa tarde. Lo que dijo e
hizo Helena al saberlo todo, tal vez sera tema de otro relato.
"
Bueno, que te ha parecido el relato de
Giselle, realmente esta chica no tiene tiempo de aburrirse con su
Ama y con sus amigas (pero que manera deliciosa de entretenerse)
Aquí hay un dibujo que creo representa como se sintió Giselle
durante sus tareas