NUESTRA SEÑORA GAUCHA DEL MATE
PRELUDIO
Cuentan que el mate inventó
ña taragüisa
Irupé,
si caliente o tereré,
no lo puedo saber yo.
Pero afirmo que encontró
en esta yerba bendita
el imán que necesita
la gente de nuestros pagos,
mientras se suman los tragos
todos se sientan cerquita.
Aquí me pongo a cantar
mientras la pava rezonga,
esta argentina milonga,
sólo para acompañar
una mateada sin par,
porque hoy ceba la Señora,
milagrosa cebadora
que en cada mate que ofrece
con su mirada parece
más que Reina, servidora.
Sabiendo que va a servir
se hace más grande la
ronda,
y en una amistad muy honda
todos quieren compartir.
No hay mucho para decir,
importa la compañía
y sentir que cada día
una fraterna mateada,
en torno a la Madre amada
llena de paz y alegría.
Más también se puede dar
que ande el criollo
solitario;
como nunca es necesario
que busque abrigo y matear.
Y ahí es bueno recordar
que hay alguien que siempre
espera
dispuesta a abrir la
tranquera
y a escuchar con atención,
las cuitas del corazón
aún del alma más matrera.
Esto que yo voy cantando
es pá todos, pero entiende
sólo el cristiano que
aprende
desde que anduvo gateando,
que hay otra Madre
mirando
y, aunque ya vive en el
cielo
gusta andar por nuestro
suelo
en medio de los cristianos
para hacernos más hermanos
sin rencor y sin recelo.
Fue inspiración sin igual
esta idea misionera
porque en palacio o tapera
la Virgen con
delantal
llama al santo y al bagual.
Y, esto no es un disparate
que se le ocurrió a un
orate
dio el Papa su bendición
a esta nueva advocación
"La Virgen Gaucha
del Mate".
Alguien podría argüir
que esta criollita es muy
seria.
Yo pienso que es la miseria
que vé, y el tanto sufrir
que le impiden sonreír.
Pero su rostro trasunta
y sencillamente junta
en su gesto humilde y puro y
tanta paz y amor maduro,
que es respuesta a la
pregunta.
Vengan todos juntos a mí,
acérquense a mi querencia,
yo comparto la dolencia
del ya grande y el gurí,
criollo, gringo o guaraní.
Si están todos a mi lado
no tiene fuerza el pecado
y renace la confianza,
porque yo soy la esperanza
para este mundo extraviado.
ORACIÓN
Madre, dulce paisanita
que tenés los ojos fijos
en todos estos tus hijos
que han acudido a tu cita,
oye el coro que musita
esta sencilla oración:
míranos con compasión
y mientras cebas tu mate
que nuestra alma se dilate
en filial contemplación.
EUSEBIO (Misionero)
Este es el seudónimo del padre Darío RODRIGUEZ
de los Padres del Sagrado Corazón de Jesús de Betharram
(Bayoneses)