PARA VIVIR UN POCO
para vivir un poco
me basta recordar el pasado
que fue mío
una guitarra aleteando
sobre el último vino
para morir un poco
sólo basta la mañana
vacía de sus manos
la ausencia de sus voces
la lágrima rebelde que no llega
si el ayer naufraga en el olvido
no seré yo quién transite estas calles
será la lentitud
será el hastío
la trágica inconsciencia de haber muerto