Esta actividad fue la primera en crearse. Se contaba con una profesora de corte y confección y con una colaboradora que se dedicaba a probar, enseñar a las mujeres a pasar hilo flojo, hilvanes, sobrehilado...

     El grupo asistente era muy numeroso en un principio, pero con el incremento de las actividades en el Centro de Promoción, el grupo se fue reduciendo, pero no por ello desapareció, ya que todavía existían muchas personas interesadas en aprender a coser y continuaron asistiendo a esta actividad e incluso algunas se integraron en otras actividades siempre que el horario se lo permitía.

      Actualmente el grupo es de unas 10 ó 15 personas y dos monitoras. El sistema  de enseñanza ha evolucionado bastante, ya que ahora también aprenden a coser a máquina, a sacar patrones de revistas, cortar etc..., ellas mismas se confeccionan su propia ropa con la ayuda de las monitoras.