Dos textos 
de Dietrich Bonhoeffer
 

 

Dios 
no es un  
"tapa-agujeros" 
 
Nace en Breslau el 4 de febrero de 1906. su padre, Karl Bonhoeffer, era profesor numerario de psiquiatría. Su madre, Paula, pertenecía ala familia von Hase. En 1912 los Bonhoeffer pasarona vivir en Berlín, en cuya Universidad Dietrich estudió teología desde 1923 hasta 1927. En 1928-29 es vicario en Barcelona. En 1929 obtiene la agregación en la Universidad e Berlín. 
 

Tegel, 
29 de mayo 1944

Veo de nuevo con toda claridad que no debemos utilizar a Dios como tapa-agujeros de nuestro conocimiento imperfecto. Porque entonces si los límites del conocimiento van retrocediendo cada vez más –lo cual objetivamente es inevitable-, Dios es desplazado continuamente junto con ellos y por consiguiente se halla en una constante retirada. Hemos de hallar a Dios en las cosas que conocemos y no en las que ignoramos. Dios quiere ser comprendido por nosotros en las cuestiones resueltas, y no en las que aún están por resolver. Esto es válido para la relación entre Dios y el conocimiento científico. 
Pero lo es asimismo para las cuestiones humanas de carácter general como la muerte, el sufrimiento y la culpa. Hoy hemos llegado a un punto en que, también para estas cuestiones, existen respuestas humanas que pueden prescindir por completo de Dios. En realidad –y así ha sido en todas las épocas-, el hombre llega a resolver estas cuestiones incluso sin Dios, y es pura falsedad que solamente el cristianismo ofrezca una solución para ellas. Por lo que al concepto de “solución” se refiere, las respuestas cristianas son tan concluyentes (o tan poco concluyentes) como las demás soluciones posibles.  
Tampoco en esto es Dios un tapa-agujeros. Dios ha de ser reconocido en medio de nuestra vida, y no sólo en los límites de nuestras posibilidades. Dios quiere ser reconocido en la vida y no sólo en la muerte; en la salud y en la fuerza y no sólo en el sufrimiento; en la acción y no sólo  en el pecado. La razón de ello se halla en la revelación de Dios en Jesucristo. El es el centro de nuestra vida, y no ha “venido” en modo alguno para resolvernos cuestiones sin solución. A partir del centro de nuestra vida, determinadas cuestiones desaparecen, e igualmente las respuestas (estoy pensando en el juicio sobre los amigos de Job). En Cristo no existen “problemas cristianos”. Pero basta ya; acaban de estorbarme de nuevo
 
 
 
Pero volvamos a nuestro tema. Progresivamente voy centrando mi trabajo en la interpretación no religiosa de los conceptos bíblicos.Pero, por ahora, veo mejor el problema que mi capacidad para darle solución. 
En el aspecto histórico se trata de una gran evolución que encamina el mundo hacia su autonomía... 
  • En teología, ante todo Herbert de Cherburgo, que afirma la suficiencia de la razón para el conocimiento religioso.
  • En el dominio de la moral, Montaigne y Bodin, que en lugar de los mandamientos establecen una reglas de vida.
  • En política, Maquiavelo, que independiza la política de la moral general y funda "la doctrina de la razón de Estado". (Más tarde H. Grotius, muy distinto a Maquiavelo por el contenido, pero coincidiendo con él por lo que se refiere a la autonomía de la sociedad humana, quien erige su derecho natural como un derecho de gentes, válido etsi deus non daretur, "incluso si Dios no existiera").
  • Por último, la filosofía aporta la conclusión: por un lado, el deísmo de Descartes (el mundo es un mecanismo que funciona por sí solo, sin la intervención de Dios); por otro, el panteísmo de Spinoza (Dios es la naturaleza). Kant, en el fondo, es deísta; mientras que Fichte y Hegel son panteístas. En todos ellos la autonomía del hombre y del mundo constituye la meta del pensamiento.
  • En el campo de las ciencias naturales, este movimiento se inicia según parece con Nicolás de Cusa y Giordano Bruno y su doctrina "herética" del carácter infinito del mundo
Dios, como hipótesis de trabajo, ha sido eliminado y superado en moral, en política y en ciencia…; pero también en filosofía y religión (¡Feuerbach!). Es pura honradez intelectual abandonar esa hipótesis de trabajo, es decir, descartarla hasta donde ello sea posible. Un médico o un científico edificante, piadoso,  es un híbrido, un hermafrodita.   
¿Dónde queda, pues, un sitio para Dios?, se preguntan ciertas almas acongojadas, y como no dan con ninguna respuesta, condenan toda evolución que les ha acarreado semejante calamidad.. Ya te escribí sobre las distintas salidas de emergencia, que conducen fuera de este espacio que tanto se ha angostado.. Cabría añadir aún el salto mortal para volver a la edad media. Pero el principio de la edad media es la heteronomía en forma de clericalismo. El retorno a este sistema sólo puede ser un acto de desesperación, que únicamente puede lograrse a costa de sacrificar la honestidad intelectual.  
Y nosotros no podemos ser honestos sin reconocer que hemos de vivir en el mundo etsi deus non daretur. Y esto es precisamente lo que reconocemos… ¡ante Dios!; es el mismo Dios quien nos obliga a dicho reconocimiento. Así nuestro acceso a la mayoría de edad nos lleva a un veraz reconocimiento de nuestra situación ante Dios. Dios nos hace saber que hemos de vivir como hombres que logran vivir sin Dios. ¡El Dios que está con nosotros es el Dios que nos abandona (Mc 15,34)!   
El Dios que nos hace vivir en el mundo sin la hipótesis de trabajo Dios, es el Dios ante el cual nos hallamos constantemente. Ante Dios y con Dios vivimos sin Dios. Dios, clavado en la cruz, permite que lo echen del mundo. Dios es impotente y débil en el mundo, y precisamente sólo así está Dios con nosotros y nos ayuda. Mt 8,17 (Para que se cumpliese lo dicho por el profeta Isaías, cuando dijo: El mismo tomó nuestras enfermedades, y llevó nuestras dolencias) indica claramente que Cristo no nos ayuda por su omnipotencia, sino por su debilidad y por sus sufrimientos.  
Esta es la diferencia decisiva con respecto a todas las demás religiones. La religiosidad humana remite al hombre, en su necesidad, al poder de Dios en el mundo: así Dios es el deus ex machina. Pero la biblia lo remite a la debilidad y al sufrimiento de Dios; sólo el Dios sufriente puede ayudarnos. En este sentido podemos decir que la evolución hacia la edad adulta del mundo, de la que antes hemos hablado, al dar fin a toda falsa imagen de Dios, libera la mirada del hombre hacia el Dios de la biblia, el cual adquiere poder y sitio en el mundo gracias a su impotencia. Aquí es donde deberá entrar en juego la “interpretación mundana”.
Vivir
sin Dios
 
 
 
 
 
 
 
 
En 1930 marcha a América y cursa un año de estudios en el Union Theological Seminary de Nueva York.  
En 1931 es nombrado profesor de la Universidad de Berlín y ejerce de consiliario en la Escuela Técnica Superior. En 1933 pasa a ser pastor de la iglesia alemana en Londres. En 1935 regresa a Alemania y es nombrado director del Seminario de la Iglesia Confesora en Finkewald. En 1936 es desposeído de su docencia en la Universidad de Berlín. En junio de 1939 acepta la invitación de profesar un curso en los Estados Unidos, pero en agosto de aquel mismo año, ante las inquientantes perspectivas de una nueva guerra, decide regresar voluntariamente a su país. A Partir de 1940, la Iglesia Confesora le encomienda algunas misiones especiales. El 5 de abril de 1943 es detenido y encarcelado en Berlín. el 9 de abril de 1945 es ejecutado en Flossenbürg
 
 
 
 
 
 
 
 
 
Tegel, 
16 de julio 1944 
 
 
Continuarás leyendo el texto...
 
 
Si quieres participar:
Aquí lo encontrarás todo, incluso las citas bíblicas
 

1