"Sería bueno - señala Lee Smolin - disponer de una teoría general de los
sistemas autoorganizados que sirviese de punto de partida para muchas
discusiones" (En Brockman, 133)
El principio que se está formulando es un modesto y parcial candidato. En
realidad se ignora cómo aplicarlo entre dos sucesivas bifurcaciones
similares a las de la Fig 7: es un tema abierto. Pero se sabe (Haken) que
en las inmediaciones previas a una transición de fase, las tres
termodinámicas, la de Boltzmann y Clausius, la de Onsager y la de
Prigogine, tienen leyes convergentes que autorizan a buscar
correspondencias recíprocas.
* 1. Intento de formulación del principio para la termodinámica clásica y
para la de Onsager
Se trata aquí de un sistema físico clásico
en el equilibrio o cercano al
equilibrio.
Aparece en dicho sistema una dinámica -
mostrando con ella que
efectivamente se trata de un sistema clásico -
que se "opone" a toda
influencia de nuevas fuerzas externas, fuerzas
impulsoras de dicha
dinámica. Esas fuerzas externas son
fluctuaciones atenuadas por el atractor de equilibrio del
sistema. Aquí la palabra "opone" alude
a la tendencia de los grados de
libertad tensos hacia la abundancia final de
grados de libertad esclavizados,
con lo cual la respuesta contrarresta al estímulo.
Ejemplo de fuerzas externas (estímulos): escalones de temperatura o
presión
Respuestas: cambios de fase
Constante de tiempo: comparativamente pequeña.
Complejidad: relativamente escasa.
Reversibilidad: aparente.
Efecto que contrarresta al estímulo: signo contrario al escalón de temperatura o presión.
* 2. Por similitud, intento de formulación especializada del principio
para abarcar el caso del cerebro, del ser humano y de la comunidad humana.
Se trata aquí de un sistema complejo cuya principal actividad es la de
efectuar cambios sobre sí mismo, esto es, uno adaptado para procesos
automodificatorios. Dicho sistema se halla en una transición de fase del
desequilibrio o cercana a ella. Aparece en dicho sistema una dinámica - mostrando con ella que
efectivamente se trata de un sistema complejo - que se "opone" a toda
influencia de nuevas fuerzas, tanto externas como internas, fuerzas
impulsoras de dicha dinámica. Esas fuerzas son nuevas fluctuaciones que
(1) se integran a la transición de fase del desequilibrio, (2) son
amplificadas y (3) llevan al desborde barranca abajo del estado
estacionario o atractor previo, hacia otro estado estacionario o atractor
posterior de relativamente menor energía, donde se produce su decaimiento
disipativo. Aquí también la palabra "opone" alude a la tendencia de los
grados de libertad tensos hacia la abundancia final de grados de libertad
esclavizados, con lo cual la respuesta contrarresta al estímulo.
Ejemplo de fuerzas externas: un camión de contramano a toda velocidad.
Ejemplo de fuerzas internas: dolor de cabeza, manifestación de un trauma.
Respuesta: respuesta de conducta, cambio de orden .
Ejemplo de nuevo estado estacionario: nueva conducta
como Homo loquens: requerir ayuda; callar
como Homo faber: maniobrar; ingerir pastilla; modificar conductas
previas; no hacer nada
como Homo ludens: explorar nuevos límites
Constante de tiempo: comparativamente larga, hasta desmesurada (logro del
"climax" en un bioma)
Complejidad: relativamente grande.
Reversibilidad: inexistente por los surcos que deja la acción, a través de
mecanismos de Hebb y otros.
Efecto que contrarresta al estímulo: alarma y respuesta a ella.
3. Intento de formulación generalizada de los dos casos previos.
El principio de Le Chatelier generalizado es una manera macroscópica de
prever la respuesta de un sistema, simple (clásico) o complejo (de la física no-lineal y del desequilibrio, de la biotermodinámica). Nos explica cómo los sistemas se comportarán cuando se intenta apartarlos de su atractor previo (en el caso clásico, un atractor de equilibrio - en el caso no-lineal un atractor en el desequilibrio). En esto ha quedado implícito que el principio mencionado es aplicable a sistemas en el desequilibrio, lo cual no aparece en las formulaciones clásicas de la segunda ley.
El estímulo externo a la caja transparente, opaca o negra (segun el caso) donde se desea aplicar el principio, esto es, la "fluctuación", desencadena en la capa de inputs una colección de nuevos estímulos que
ponen en marcha una "ida" que es la organización de una segunda,
tercera,..., enésima cascada de respuestas y viceversa, ponen en marcha una "vuelta" que
consigue que a partir de la segunda,..., enésima cascada lleguen otros
estímulos que reorganicen a todas las restantes cascadas, incluso a la primera. Con
esto se reorganizan y se recategorizan uno solo o pocos estados (en los casos clásicos) y un elevado número de estados (en los casos no-lineales y del desequilibrio) de muy diferentes niveles de organización.. Cuando definimos estos mecanismos como mecanismos de destrucción del gradiente, evitamos completamente los problemas encontrados por Prigogine (1955) y más tarde por Swenson (1989), quienes usan principios de extremo basados en el concepto de entropía para describir a los sistemas autoorganizantes. Los sistems en el desequilibrio pueden ser descriptos por sus fuerzas y por sus flujos requeridos usando métodos bien desarrollados por la termodinámica de redes
(Katchalsky y Curren, 1965, Peusner, 1986, y Mikulecky, 1984).
En terminología termodinámica, un sistema que ha llegado a un valor umbral de
complejidad, por envolvimiento consigo mismo, puede acceder a volverse más
complejo. Pero en base a la regla de Hebb generalizada, no es ya del todo
reversible la vuelta del sistema complejo emergente hacia el menos complejo
que lo generó. La vuelta a la misma complejidad umbral, cercana a la
simplicidad, es imposible. El estímulo genera una respuesta intermedia
clásica, que a continuación tiende no-clasicamente a un nuevo intento de
estado estacionario autoorganizante, a través de una cascada tanto de
respuestas, como de estímulos-respuestas irreductibles a condiciones
previas. Ya no son un caso más de las situaciones en que todo cambia para
que todo pueda seguir siendo igual. Es cierto que el estímulo provoca una
respuesta, pero la segunda, tercera,..., enésima vez que ingresa el mismo
estímulo, la respuesta ya no es la misma, cambió y divergió (aprendizaje
hebbiano).
El principio de Le Chatelier generalizado se aplica con facilidad a los
casos de violaciones a la homeostasis: hambre, sed, respuesta al frío o al
calor. Hay evidencias que indican que una violación a la homeostasis
desencadena una señal de conducta dirigida a una máquina de diferencias
entre la realidad - las percepciones actuales y el presente estado
motivacional - y lo óptimo - el estado de referencia relacionado con los
sentimientos (APENDICE 7). Son nociones comparables y unificables las de
aplicar el principio de Le Chatelier y las de mantener homeostasis. En la
Fig 11 se supone que lo que empieza siendo un mecanismo para mantener
homeostasis acaba siendo un sistema de control del comportamiento. Las
percepciones del mundo externo tienen como meta la modulación del estado
motivacional, aplicando el principio que se está proponiendo.
La defensa de su fuente de alimentos es otra motivación, aún más importante
que la homeostasis misma. Tambien se puede reconocer la tendencia a impedir
la aparición de estímulos molestos, como el dolor. Existen relojes
biológicos como la aparición diaria de cansancio y sueño o el impulso
migratorio. El hambre, la sed, la líbido también tienen aspectos cíclicos.
La tendencia a acicalarse cuando no hay nada que hacer, tambien es
espontánea. El planeamiento de necesidades futuras ya se ha mencionado a
propósito de la mente distraída, durante la cual pasa a ser una actividad
típica. Se podrían explicar aplicando el mismo principio. El reconocimiento
de una alarma es la etapa inicial común a todos.
Se deja para una referencia en hipertexto el tema de aplicar el principio de Le Chatelier generalizado a la hipótesis de que el planeta es un
ecosistema único que se autopreserva, denominado "Gaia"..
Friedrich R, Haken H - A short course on synergetics, en Proto AN -
Nonlinear phenomena in complex systems, North Holland, 1989.
Minsky (28.6)
Margulis L en Brockman, p 120
Cohen J, Stewart I - The Collapse of Chaos, Penguin Books, 1994, p 350
Balkenius, Ch - Natural Intelligence in Artificial Creatures, Lund U. 1995
- 6.3
por
ejemplo, protomentes, grafemas, memes perceptuales, sememas, memes
conceptuales, fonemas, capas de limpieza, etc. (Edelman, en Claucey,
Art.Intel. 60 (1993) 316)