Título original: Dragonheart
Género: Aventuras / Fantástica
Nacionalidad: USA
Año: 1996
Duración:  99 minutos

Director: Rob Cohen
Productor: Raffaella de Laurentiis
Producción: Universal Pictures
Guión: Charles Edward Pogue, según una historia suya y de Patrick Read Johnson

Intérpretes: Dennis Quaid, David Thewlis, Pete Postlethwaite, Dina Meyer, Julie Christie, Sean Connery.

Argumento:

    Hace mucho tiempo, cuando el hombre era joven y el dragón ya era viejo, el más sabio de entre la raza se apiadó del hombre y reuniendo a los demás dragones les hizo jurar que protegerían a los humanos desde entonces y para siempre... Mucho tiempo después, en una revuelta contra su malvado padre, el joven príncipe Einon resulta herido y su madre, la reina Aislinn, invoca a un dragón para salvarle la vida. Quien acude en su ayuda otorgándole la mitad de su corazón para que siga existiendo es Draco, que pone una condición: Einon debe jurar que no seguirá los pasos de su padre. Sin embargo, pasa el tiempo y el nuevo rey demuestra ser más tirano aún que su predecesor. Entonces, convencido de que la esencia del dragón es lo que le ha envenenado, su virtuoso instructor y fiel servidor Bowen, jura dar muerte a todas los dragones que queden en la tierra.

    Plagada de humor, fantasía y deslumbrantes efectos especiales, que corrieron a cargo de la siempre competente Industrial Light & Magic, "Dragonheart (Corazón de dragón)" es una aventura épica tan vibrante como conmovedora.

    El realizador de esta entretenida odisea en la que los dragones han pasado a ocupar el primer puesto dentro de las criaturas infográficas del cine fantástico actual, desbancando así a los dinosaurios, ha sido Rob Cohen, que comenta respecto al espectacular despliegue de efectos en la película: "Para que se vea la magnitud del proyecto, valga decir que en "Parque Jurásico" había 59 planos con elementos creados por ordenador y "Dragonheart" tiene 170".

    Un actor de carne y hueso, Dennis Quaid ("Gran bola de fuego", "La leyenda de Wyatt Earp", "Savior"), y un dragón parlanchín de 5 metros de alto y 13 de largo -que tras su aparición en este filme se convirtió en la bestia más impresionante de los últimos tiempos- encabezan el reparto de este fabuloso relato de corte medieval. Ellos encarnan a Bowen, un valiente caballero cazadragones, y a Draco, la última criatura de su especie en la tierra. Unido irremediablemente al joven soberano Einon porque le prestó la mitad de su corazón para que pudiera seguir viviendo tras sufrir una terrible herida, Draco es perseguido por Bowen hasta que llega un momento en que ambos se hacen amigos y juntan sus fuerzas para luchar contra el déspota de Einon, que les ha traicionado a ambos. Lo malo es que la desaparición del rey conlleva también la muerte de Draco y con él, la extinción de su especie.

    Entre los actores secundarios destacan David Thewlis ("Eclipse total", "Restauración", "Siete años en el Tibet"), encarnando al príncipe y más tarde rey Einon; Julie Christie ("Hamlet", "Afterglow"), en el papel de su madre, la reina Aislinn; Dina Meyer ("Johnny Mnemonic"), como Kara; Pete Postlethwaite ("En el nombre del padre"), en el papel de Gilbert; y Jason Isaacs ("Un tipo de altura"), como Lord Felton.

    Por último, en la versión original fue Sean Connery quien prestó su voz al expresivo Draco, mientras que en la versión española lo ha hecho Francisco Rabal, otro mito de la pantalla que no tiene nada que envidiar al personal, reconocible y poderoso timbre de voz del actor irlandés.

    Rodada en gran parte en los alrededores de Bratislava, la capital de Eslovenia, la película contó con el trabajo de un español, el diseñador de producción Benjamin Fernández, a quien Rob Cohen ha calificado como "uno de los mejores del mundo".