EN LOS LABIOS DEL AGUA



Cuato Sueño: El Sueño de Un Mar Quieto



Soñé que me besabas y que con besos me obligabas a cerrar los ojos. Con tus manos partabas las mías de tu espalda, de tu nuca. ahora sólo tú podías acariciarme. Subías por mi cuerpo como una marea, como un brazo de mar, como un río, y tu agua estaba caliente. tus besos caían en catarata por mi cuello. Tus manos rozaban mi cara como parvada de gaviotas hundiendo el pico en el agua, buscando alimento. Olías a mar y tu oleaje me arrullaba. Hacías con las manos caracoles que ponían en mis oídos para convencerme de que eras mar, no río. Y con tu lengua pescabas los secretos de la mía. "Sólo un cuerpo dócil y quieto puede aprender a ser agua", me amenazabas al oído, "sólo así nos navegamos: agua sobre agua". Entusiasmado abrí los ojos y ya no estabas. Los cerré y de nuevo aparecías. Cada vez que trataba de mirarte o de tocarte no estabas ya conmigo y el sudor que cubría mi cuerpo comenzaba a enfriarse. Pero volvías a navegarme en cuanto yo regresaba a la docilidad en que me habías moldeado.

Aziz Al Gazali

Página Principal
Literatura


Primer Sueño
Segundo Sueño
Tercer Sueño
Cuarto Sueño
Quinto Sueño
Sexto Sueño
Séptimo Sueño
Octavo Sueño
Noveno Sueño


This page hosted by GeoCities Get your own Free Home Page


1