¿Todos estamos conectados?
30 de Julio de 2006

Una de las hipótesis que mas me intrigan (que escribí en hipótesis anteriores) es que en el transcurso de la evolución había cierta inteligencia en esta, inteligencia producto de la misma evolución. ¿Cómo opera esta inteligencia? La interrogante surgió del artículo sobre la evolución de los pinzones de Darwin, al final de ese artículo dice "¿cómo "sabe" el material genético de las aves que ha de priorizar en la reproducción los genes que permiten generar individuos de pico más pequeño y por tanto más adaptados a las condiciones de su entorno?", porque lo sorprendente de esta evolución es el muy poco tiempo que tomó (unas décadas).

Surge entonces una hipótesis nueva haciendo uso de las hipótesis anteriores:

1. La evolución no es 100% ciega, ella misma ha generado mecanismos que le permiten retroalimentarse y mejorar su propio proceso evolutivo.

2. Estos mecanismos de retroalimentación y decisión se pueden interpretar como inteligencia en la evolución.

3. El problema con una evolución inteligente es que puede caer en máximos o mínimos locales, optimizando o mejorando mecanismos ya existentes, cerrándole el paso a soluciones radicalmente creativas que puedan llevarnos a máximos o mínimos globales.

4. La solución al punto 3. es que la evolución genera gran biodiversidad, cada rama solucionando por su cuenta problemas similares (y su propia inteligencia evolutiva), si una rama se estanca (o una especie se estanca) simplemente corre con el riesgo de extinguirse cuando otra rama o especie llegue con mejores soluciones.

5. Una forma de acelerar mas el proceso evolutivo es que los organismos compartieran información (es similar a los investigaciones humanas, si se trabaja en forma aislada, sin compartir, muchos caerían en "rehacer la rueda" o "caer en los mismos errores" o "llegar a los mismos callejones sin salida", al compartir la información se reduce considerablemente esta pérdida de tiempo y recursos). Yo creo que los organismos inconscientemente comparten información (y es lo muy arriesgado de mi hipótesis), porque debe haber un mecanismo físico no conocido hasta ahora que sirva de puente de comunicación entre especies, tanto a nivel de organismo simple como de macroorganismo. Todos al final estamos conectados. Esto puede simularlo fácilmente con algoritmos que comparten información.