Una monjita iba caminando con un grupo de novicias interinas por un parque, de pronto, ve a un hombre completamente desnudo acostado en la grama y con el pene calibre 38 erecto.
Sus alumnas no debían ver semejante espectácu-lo, decidió sentarse sobre el vulgar hombre, tapándolo piadosa-mente con su habito. al poco rato de estar en dicha posición, empezó a sudar, a ponerse con los ojos como vendedor de prendas y comenzó a darles a sus alumnas el siguiente sermón:
"AY" San Alejo: me esta rompiendo el pellejo.
"AY" San TADEO: que rico este meneo.
"AY" Santa CIRIACA: me lo mete y me lo saca.
"AY" San BENITO: este huevo si esta rico.
"AY" San CLEMENTE: este carajo me esta nublando la mente.
"AY" San BERNARDINO: con este huevo presiento que me orino.
"AY" San ANGULO: me lo esta metiendo por el culo.
"AY" San JUSTINIANO: ya no lo soporto por el ano.
"AY" San FERNANDO: ya estoy acabando.
"AY" Santa INES: ya acabe otra vez.
"AY" San ANDRES: me voy a voltear otra vez.
"AY" Santa CLARA: a este huevo le doy una mamada.
"AY" Santa CRISANTA: lo siento hasta la garganta.
"AY" San ARMANDO: me acabo y me lo estoy tragando.
"AY" Santa CANUTA: se jodio el convento y me meto a PUTA!!!!.