Iñaki Castillo inauguró el pasado 30 de julio, a las 7 de la tarde, en el Horno de la Ciudadela de Pamplona. Una exposición de esculturas que estará abierta al público desde el 30 de julio hasta el 23 de agosto de 1998. (Lunes a sábados de 18 a 21 h. domingos y festivos de 12 a 14 h.)  
        En esta exposición se presenta una selección del trabajo de 12 años de investigación sobre el hombre y su entorno: El reflejo de la vida del hombre en la ciudad. En la Instalación-Oración, se podrán ver esculturas figurativas como el retrato de Ander (el hombre), el pensador (homenaje al escriba), y un torso (Tadeus). Y tallas en madera que son síntesis de la bolsa de basura como la parte de la vida del ciudadano. El espacio del horno aglutina la oración que componen la escultura figurativa y la abstracta. Las esculturas figurativas son originales de terracota. Las tallas están realizadas en madera de ébano, roble, acacia, pino y abedul, con elementos metálicos de aluminio o hierro.

        Desde la exposición en la galería Metrònom en abril de 1985, Iñaki Castillo investiga en dos líneas: por un lado empieza en la figura humana con el estudio en profundidad de la anatomía y del retrato, por otro se centra en la talla en madera de sus bolsas y satélites. La exposición funde en el horno las dos líneas de investigación en una oración.  
        La exposición está expresamente realizada y creada para el espacio del horno, él es parte integrante de la exposición: “El espacio del horno, su relación circular y esférica, y las esculturas no son una suma de partes sino un todo, una estructura. Un pequeño universo, una oración.”  
        Más que una instalación Iñaki presenta una oración: “Se trata de una oración más que de una instalación, en la que el hombre niño se presenta en el centro de un universo de bolsas-satélite que son su pasado y su futuro. Son lo que va dejando en sus ciclos la vida del hombre: su propia basura.”  
        El montaje, con Ander (el hombre) en el centro del horno y a su alrededor las bolsas y los satélites, es como un planetario a escala real por el que podemos caminar entre los satélites imaginarios que giran bajo la cúpula celeste del horno. Iñaki Castillo nos traslada a otro lugar: “En este espacio mágico construyo y rezo una oración.”  
Nota: Se editó un catálogo de 16 páginas con un texto de I. Castillo y fotos en detalle de las esculturas y un texto de Koldo Chamorro (21x21 cm. Blanco y negro). D.L. NA 1654/98.