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Irena, procedente de Serbia, trabaja como figurinista y conoce a Oliver. Su primer amigo en Estados Unidos. Para Irena es difícil integrarse porque sabe que es diferente. Todo a su alrededor es aparentemente limpio, correcto, apacible; en cambio ella es demasiado humana. Tiene que ocultar sus emociones, su miedo de sí misma, su agresividad, para no desentonar con la sociedad gris a la que representa Oliver. Irena: 'Sé que hay algo malvado en mí' 'Envidio a esas mujeres que pasean por la calle, sus vidas son felices, hacen felices a sus maridos' Oliver: 'Toda mi vida he sido feliz, no conocía la infelicidad, hasta que la conocí a ella' Y todavía hay quien se sorprende de que a muchos, los malos de las películas nos resultan mucho más atractivos que los buenos. Una de las cosas que destacan en esta obra maestra es su ambigüedad. Jacques Tourneur nunca nos mostraría una de esas aparatosas transformaciones que se pusieron de moda en los 80, sino que se decanta por el misterio, la incertidumbre; el espectador es libre para ver en Irena realmente a una mujer pantera, o no. Y ella también es por fin libre, aunque le cueste la vida. |
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