Llega la noche, es hora de descansar, mis ojos adormilados, se empiezan a cerrar,recordando paso a paso cada una de sus palabras,me vence el sueño anhelado y empiezo a soñar.
Miro el hermoso paisaje, ese lindo azul de cielo, acompañado de nubes blancas, como chispas de algodones en el viento, de repente en el paisaje, aparecen dos puntos blancos, estos alegres brincando, evitando el encontrarse.
Así siguen jugando y solo se detienen curiosos, por saber como es cada quien, brincan de un lado a otro, jugando despreocupados, que no se dan cuenta, que en la ultima vuelta ellos se han encontrado. Sorprendidos se miran, al descubrir ser diferentes viéndose detenidamente. El aire indiscreto llega, quitándoles las mantas y así se quedan los dos frente a frente asustados, contemplando su desnudez.
El se acerca a Ella tomándola de la nuca, juntando los dos cuerpos, sintiendo lo tibio de su piel, Ella asombrada, deja que El lo haga, le gusta lo que esta sintiendo y se deja mandar por El. Sus manos la acarician, se va lento no lleva prisa, quiere conocer cada punto de su piel.
Siguieron danzando, los dos gozando, acariciándoce cada uno la piel y el alma. Así continuaron, hasta el momento deseado, donde El le entregaba, sus jugos de amor, Ella correspondió juntando los dos, con gemidos de placer con besos de Amor.
Los dos exhaustos quedaron, complacidos por descubrirse, por haber aprendido la danza del Amor, Ella descansa en el torso de El, El contento le acaricia la piel. Y ahí quedan entre nubes de algodón reposando gustosos por haberse atrevido a conocerse los dos.
Ya esta amaneciendo, el sol pega en mi cara, se siente celoso y logra el despertarme, abro mis ojos, de mis labios sale un suspiro, deseando que algùn día, seamos así de atrevidos. Dime Amor, Te gustaría?